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Un día como hoy en 1967 Independiente goleaba 4 a 0 a racing y se consagraba primer Campeón Nacional del fútbol argentino. Claudio Abuin preparó un nuevo video para recordar a ese gran equipo.   

Porque si bien hoy todos están con la cabeza en Qatar, yo como saben antes que nada soy hincha de Independiente y como hincha fanático del más grande de América no puedo dejar pasar esta fecha ya que se cumplen 55 años de aquel logro de ese gran equipo dirigido por el Sr. Brandao que logro salir Campeón de punta a punta con 12 “nocaut” 2 empates y una sola caída contra San Lorenzo…

Un equipo con “Mentalidad goleadora” como decía “El Grafico” de esos años, 43 goles en 15 partidos, impensable para estos tiempos amarretes. Tenían un promedio de 3 goles por partido, solo miraban el arco de enfrente, no había lugar para especulaciones, ya que si bien en esa década había “algunos” como los de la Plata que apuntaban a otro futbol más amarrete, estaba Independiente que nunca bajo los brazos y con la frente en alto hizo historia en ese Nacional.

Y ya que estamos porque no poner el resumen de lo que escribió “Juvenal” que describe como nadie a ese Independiente del 67’ enfrentando sin decirlo al otro “fútbol” el amarrete que antes comenté…


“La Conquista de Independiente tiene el enorme mérito y la positiva trascendencia de consagrar al futbol con mayor mentalidad goleadora visto en 1967.

Los Rojos anotaron 43 goles en los 15 partidos del Nacional, con un promedio excepcional de 3 goles por partido, lo que no se conseguía en nuestro futbol desde que el ataque riverplatense dirigido por Alfredo Di Stefano consiguió 90 goles en 30 partidos, igualando lo hecho en el año anterior por la línea de San Lorenzo que piloteaba Rene Pontoni. Han pasado 20 años desde entonces y si le sumamos los 33 tantos que Independiente señalo en los 22 encuentros del Metropolitano, el total arroja 76 goles en 37 partidos con una media igualmente muy buena de algo más de 2 goles por partido…


Pero al margen de lo que ponderen los números, está el hecho cierto de que Independiente fue siempre al ataque, incluso llego a despertar críticas por su excesiva tendencia a comprometer gente en la ofensiva restándole importancia a la media cancha.

Pero en los tres últimos encuentros esa media cancha se vio reforzada con la presencia de Mura en función de lucha y obstrucción, pero al mismo tiempo le concedió mayor libertad a Savoy para crear futbol netamente ofensivo despreocupándose de la lucha por obtener la posesión de la pelota.


La tarde que protagonizo un espectáculo de inusitada belleza futbolística fue contra San Lorenzo en Avellaneda a comienzos del Metropolitano, ahí señalamos que en el equipo de Brandao se estaba gestando una mezcla detonante de fluidez y potencia, de riqueza técnica y gran poder ofensivo. En otros partidos del Metropolitano, y aun en algunos momentos del Nacional esa mezcla no llego a producirse, posiblemente le faltaron los dos ingredientes que tuvo en los últimos partidos.

1 La toma de posición definitiva de Raul Savoy respecto al gran papel que su talento puede y debe cumplir dentro de cualquier equipo que integre.

2 El retorno de Luis Artime al nivel de producción de sus mejores tiempos cuando sus compañeros de River lo llamaban la fiera recordando que con Luis al igual que en la época de Bernabé River salía a la cancha ganado 1 a 0.


Pero a estos factores tenemos que sumarles la inalterable regularidad de Pavoni, el repunte notorio de Santoro, las locuras geniales de Bernao, la contundente velocidad de Tarabini, la personalidad exuberante del Pato Pastoriza y este retorno de Mura a su gran momento de 1963/64 que hicieron detonar la explosiva alegría de otro título de campeón en la nueva capital del futbol Argentino

Y quienes venimos clamando por un juego más agresivo, más pujante, mas ambicioso para derrotar de una vez al signo de no-gol que nos estaba matando poco a poco saludamos con alegría esta consagración de un conjunto que con otro estilo y otros matices ha tomado la bandera de la revolución que inicio Racing el año pasado para hacerla flamear entre gritos de gol y estribillos triunfales…”


¿Y mi amigo que le parece, no tengo razones para recordar esta fecha?

Salud al equipo de Brandao que supo llevar a lo más alto al futbol Argentino, con clase, con buen gusto y alegría, dejando atrás al “otro”, al “amarrete”, el que jugaba a no perder, casi como los que sufrimos con Falcioni que solo tenían la diferencia de la agresividad de sus jugadores, pero en el juego eran iguales, ya que con solo fijarse en sus números una se da cuenta, ya que tenía casi los mismos partidos ganados que empatados, y menos de la mitad de goles que Independiente...

Claudio Abuin
Especial para La Caldera del Diablo



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