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El manager de Independiente dijo que habla continuamente con Domínguez sobre la conformación del plantel y los posibles refuerzos. Además, se refirió a los futbolistas que fueron marginados y también las charlas en torno a Iván Marcone, la situación de los llegados de Ucrania y la oferta de renovación para Blanco. 

"Yo trabajo para Independiente, esté quien esté como dirigente. Y si luego vienen otros y no me quieren, me iré. No me meto en política porque pierdo tiempo", dijo Daniel Montenegro este mediodía en diálogo con TyC Sports. 

"El plantel está casi al día, cobraron abril. La idea es que haya orden en el Club y poder ofrecerle eso a los jugadores para que sólo tengan que pensar en jugar. Cuando las cosas andan mal, es difícil jugar en Independiente por las presiones que hay. Pero cuando las cosas andan bien, es hermoso por todo lo que genera este Club", señaló el manager. 

Pensando en el partido ante San Lorenzo, el Rolfi adelantó que "se concentrarán 18 jugadores porque es lo que tenemos. Quedó como que limpiamos a 12 jugadores, pero varios ya no estaban jugando y les va a venir bien salir 6 meses a préstamo, con una cláusula para volver. Hay varios chicos que saltaron un proceso de crecimiento porque el club tenía urgencias". 

"Necesitamos refuerzos y queremos algo mejor para Independiente. A nosotros nos exigen y nosotros también exigimos. Para mejorar, se necesitan jugadores, no hay milagros. Hablo constantemente con Eduardo Domínguez. Entendíamos la situación complicada de enero, porque había inhibiciones y complicaba la llegada de jugadores. Ahora eso no está y el mercado tiene que ser diferente. Hay que apuntar bien los refuerzos", insistió Montenegro. 

Consultado por la polémica de las últimas horas tras los dichos del técnico Eduardo Domínguez y la respuesta del empresario Christian Bragarnik, el Asesor Deportivo aclaró: "Hablé varias veces con Marcone. Cuando están en Europa, prefiero mantener las charlas ocultas porque sino después queda como que no quieren venir. Ahora el DT metió presión, estuvo un poco duro, pero no sé si está cerrado por las ganas de Iván. Domínguez habló de Marcone porque siempre se lo nombra, quiso decir que no es fácil. Lo quiere, pero Bragarnik mismo manifestó que saldría 2 millones de dólares. Marcone es un referente por lo que quiere al club, pero hay un barrera". 

"Lo que más quiere Eduardo es un central y un 9, porque son los que impiden goles y los que hacen goles. Necesitamos mínimo cuatro refuerzos. Es difícil para un manager meterse en la economía de un club y saber con cuánto dinero cuenta para gastar en un mercado. Después de buscar un jugador tenemos que ir a hablar con los dirigentes para cerrarlo", comentó. 

Respecto a los futbolistas que llegaron a raíz del conflicto bélico en Europa, el Rolfi apuntó: "Todavía debe expedirse la FIFA respecto a la liga de Ucrania. Eso definirá si Cazares y Poblete continúan en Independiente. Hay una intención de que sigan y charlas para que renueven hasta diciembre". 

"Domingo Blanco tiene una oferta importante de Independiente sobre la mesa. Depende de él y es difícil meterse en la cabeza de cada uno. El club hace un esfuerzo para que siga", finalizó Montenegro. 

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