Con muchos errores no forzados, Independiente cayó 2 a 1 ante Guaraní en Asunción. Marcone se fue expulsado al final de la primera parte, y Loyola empató transitoriamente en la segunda mitad. La caída dejó al Rojo último en el Grupo A.
Por la tercera fecha de la Copa Sudamericana, Independiente perdió en Paraguay ante Guaraní y se complicó la clasificación al quedar último en el Grupo A. El Rojo volvió a mostrar las falencias que tiene casa vez que sale de Avellaneda y ahora deberá obtener todos los puntos que le quedan por jugar para aspirar a pasar de fase.
El Rojo empezó mejor el encuentro en el Defensores del Chaco y tuvo las mejores situaciones, incluso una pelota en el travesaño. Sin embargo, un grosero error de Sebastián Valdéz le dio la posibilidad a Gustavo Vargas de abrir el marcador a los 28 minutos. Si a eso sumamos problemas en la definición de los Diablos que esta noche salieron de blanco el panorama empezó a ser favorable al local, que con la ventaja empezó a crecer.
Todo se complicó aún más cuando al final de la primera mitad Marcone le tiró una patada desde el suelo a Alcides Benítez. El VAR llamó al juez del encuentro y expulsó al volante. Pese a arrancar la segunda parte con un hombre menos, Independiente salió con otra impronta y llegaría al empate gracias a Felipe Loyola, que entrando por el segundo palo conectó una pelota que peinó Cabral tras centro de Angulo.
A falta de diez minutos para el final, los paraguayos volvieron a marcar a través de Vargas y así se quedaría con los tres puntos que dejaron al Rojo sin nada.
Emiliano Penelas
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