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No hay caso, ven una camiseta Roja y los jugadores de racing no pueden con el estigma de la historia: Independiente goleó 4 a 0 a la academia en el inicio del fútbol de verano en Mar del Plata.

Fredes festeja el primer gol del Rojo en el año

Un partido livianito, de piernas flojas y sin demasiada presión no fue excusa para que la historia no apareciera con todo su sello dramático para los hinchas de racing que ilusionados esperarán volver a salvarse del descenso este año. Independiente, con mayoría de juveniles y suplentes, aplastó al equipo de Llop, que puso casi todo lo que tiene en el primer partido del verano.

El partido fue entretenido, sobre todo en lo que a fútbol respecta en la etapa inicial, y los goles en la segunda parte. Comenzó con el Rojo jugando de contra, encontrando numerosos espacios en la defensa racinguista, que avanzaba dejando huecos en sus últimas filas.

En el primer tiempo el que manejó los hilos del fútbol fue Federico Higuaín. Lugüercio era el delantero de racing que causaba más preocupaciones, pero sin fuerza ni precisión en la definición, todo quedaba en las manos de Gabbarini, otra de las figuras en esa primera etapa, respondiendo siempre con solvencia.

Apenas pasado el cuarto de hora, un corner jugado rápido deriva en Higuaín, que empala un centro muy bonito para que Fredes, entrando al área chica, conecte de cabeza para poner el 1 a 0. Un par de minutos más tarde, Gandín tuvo otra clara ocasión y luego fue Sosa, absolutamente perdido todo el partido, quien desperdició dos contragolpes.

La más clara de racing en el partido vino casi a la media hora de juego, cuando Mareque deja muerta una pelota en el punto del penal y Caballero, desde el piso, alcanza a tocar el balón con la punta del botín, que da en la base del palo. Eso fue todo lo que hizo la academia. Independiente pudo estirar la ventaja cerca del final, cuando Migliore tapó otra entrada de Gandín.

Patito entró en el complemento y puso el segundo

La segunda parte fue mucho menos intensa y más veraniega, con pases imprecisos, jugadores cansados y menos ritmo. Sin embargo, ahí el Rojo fue contundente y lo ganó con claridad. La entrada del Patito Rodríguez por el inexpresivo Sosa le dio al equipo más explosión y calidad en el ataque.

Ya había amenazado a los 19' Higuaín eludiendo a varios, hasta el arquero Migliore, pero sin poder definir al final. Y dos minutos más tarde es el Pipita quien desde el piso, en el vértice del área, la toca para Gandín, que le pega cruzado, el uno de racing da rebote y el Patito lo aprovecha para gritar el segundo.

A esa altura todo era de Independiente y ya empezaban a escucharse los primeros oles del año. Hasta que el Chipi Gandín, quien no se va a Huracán y aparentemente se quedará en el Rojo, lo definió con dos goles en cuatro minutos. Primero a los 27', en una gran contra que inicia Ríos en la mitad de la cancha, tocando largo para Rodríguez, que de primera devuelve al Chipi, quien entrando por el centro anota desde el punto del penal.

A los 31 minutos llegó el 4 a 0, tras un corner desde la derecha que Vittor cabecea en el segundo palo y Gandín nuevamente entrando como goleador, la pone abajo cruzado, rematando en el área chica ante la pasividad de los jugadores de racing.

Alegría entre la gran cantidad de gente que se fue hasta Mar del Plata a ver este esperanzador comienzo de año. Ojalá se siga en este camino.

Emiliano Penelas

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