Miguel Ángel Santoro viajó más de quince horas para estar presente en la cena del décimo aniversario de la Peña de Comodoro Rivadavia, y recibió el cariño de más de 200 hinchas de Independiente.
A los 77 años, la odisea de Pepé Santoro para viajar a Comodoro Rivadavia lo pinta entero como persona, y como si hiciera falta algo más, lo sube un poco más en sus condiciones de ídolo. Partió del Aeroparque metropolitano a las 11 de la mañana para llegar a Comodoro Rivadavia alrededor de las 13:30 horas.
El viento patagónico obligó al vuelo a desviarse hacia Trelew, a unos 500 kilómetros. Tras dos horas dentro del avión esperando completar el itinerario, la aerolínea les dio la posibilidad a los pasajeros de volver a Buenos Aires o llegar hasta Comodoro por tierra. Los intregantes de la Peña teniendo en cuenta muchos factores (edad, estado de salud, cansancio, distancia) le pidieron que regrese, según relataron en su cuenta de Twitter.
Pepé se negó, y se subió a un micro de larga de distancia a las 16 y llegó pasadas las 22 horas a la cena, en el Centro Gallego de Comodoro Rivadavia, donde lo aguardaban más de 200 hinchas de Independiente que lo recibieron con los brazos abiertos para celebrar los 10 años de la Peña Santoro-Agüero de esa ciudad.
A los 77 años, la odisea de Pepé Santoro para viajar a Comodoro Rivadavia lo pinta entero como persona, y como si hiciera falta algo más, lo sube un poco más en sus condiciones de ídolo. Partió del Aeroparque metropolitano a las 11 de la mañana para llegar a Comodoro Rivadavia alrededor de las 13:30 horas.
El viento patagónico obligó al vuelo a desviarse hacia Trelew, a unos 500 kilómetros. Tras dos horas dentro del avión esperando completar el itinerario, la aerolínea les dio la posibilidad a los pasajeros de volver a Buenos Aires o llegar hasta Comodoro por tierra. Los intregantes de la Peña teniendo en cuenta muchos factores (edad, estado de salud, cansancio, distancia) le pidieron que regrese, según relataron en su cuenta de Twitter.
Pepé se negó, y se subió a un micro de larga de distancia a las 16 y llegó pasadas las 22 horas a la cena, en el Centro Gallego de Comodoro Rivadavia, donde lo aguardaban más de 200 hinchas de Independiente que lo recibieron con los brazos abiertos para celebrar los 10 años de la Peña Santoro-Agüero de esa ciudad.
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