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El joven valor del equipo de Miguel Brindisi, de padre salteño, forjó parte de su infancia futbolera en La Linda. 



Sin lugar a dudas, Leonel Miranda fue una de las revelaciones de Independiente en el Primera División, antes de descender al Nacional B. Quizás muchos de los salteños no conocen al Lolo Miranda, quien siempre tuvo a Salta en su corazón. El volante, de padre salteño, desde pequeño vino a La Linda cada vez que pudo para visitar a sus abuelos paternos. Parece que fue ayer cuando aquel chico de Buenos Aires (hoy con 19 años) jugaba en la calle Tejada del barrio José Vicente Solá y deslumbraba con sus gambetas en los picados que se armaban sobre aquella calle salteña.

“Cuando era más chico venía a Salta y jugaba algunos partidos con amigos disfrutando los días de vacaciones, siempre me acuerdo de esos momentos que pasé acá en Salta”, le comentó Miranda a El Tribuno.

Justamente, aquellos chicos con los que jugaba Miranda, hoy más “creciditos”, de vez en cuando se juntan para ver algún partido de Independiente, a pesar de que muchos de ellos no tienen directa devoción por el rojo, pero lo siguen por el simple hecho de que juega el Lolo.

“Soy de venir mucho a visitar a mi familia por parte de mi papá. Me encanta Salta, es muy tranquilo y un lugar para estar”, sintetizó el volante de Independiente, quien, además, se refirió a la pretemporada que está realizando con su equipo en nuestra ciudad. “Nos tocó un lindo clima, el grupo está muy bien, estamos todos unidos pensando en volver lo más pronto posible a Primera”, remarcó.

Sobre el largo caminó que deberá afrontar el Diablo Rojo, Miranda sostuvo: “Será un campeonato difícil y muy largo. Vamos a tener que demostrar que estamos para volver rápido y que estamos todos para jugar, tanto los chicos como los grandes”.

“El grupo está trabajando muy duro para conseguir el objetivo de volver lo más rápido posible. A los hinchas les diría que se ilusionen, porque hay un buen material para lograrlo”.

Por último, el jugador surgido de las inferiores del rojo destacó dos grandes momentos en su corta carrera como profesional.

“Hay dos momentos que jamás olvidaré en mi vida. El primero fue cuando me avisaron que iba a subir a Primera y el segundo, cuando le convertí el gol a racing. Eso fue algo soñado”, concluyó Leonel “el Lolo” Miranda, un salteño más por adopción.

Diario El Tribuno de Salta

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