El Rojo juega esta noche por su primer título en ocho años, y desde hace quince que no alza una Copa. Anoche, la gente le dio su apoyo al plantel en el Estadio y algunos se fueron hasta el hotel del Goiás.
Todavía se grita aquel cabezazo de Pusineri en 2002, que abriera las puertas del campeonato local, el último título que festejó Independiente. Ni qué hablar de los más memoriosos y añejos, que aún recuerdan el cabezazo de Mazzoni que empezó a escribir la Supercopa del 95, la última diadema del Rey de Copas.
Por eso esta noche, ante Goiás, las ilusiones son muchas y las ganas enormes. El Rojo se jugará todo por dar vuelta el 0-2 de la ida en Brasil y para eso deberá al menos ganar por la misma diferencia (no hay ventaja para el gol de visitante) para forzar alargue y penales, o vencer por tres goles para olvidarse de ese sufrimiento.
El partido comenzará a las 21 con el arbitraje del colombiano Oscar Ruiz. Independiente irá con: Hilario Navarro; Eduardo Tuzzio, Carlos Matheu, Julián Velázquez, Lucas Mareque; Nicolás Cabrera, Roberto Battión, Hernán Fredes; Nicolás Martínez; Patricio Rodríguez y Facundo Parra.
El Goiás: Harley; Hernando, Rafael Toloi, Marcao; Douglas, Amaral, Carlos Alberto, Marcelo Costa, Wellington Saci; Rafael Moura y Otacilio Neto.
Te grito acá y allá
Ayer fue el día del "estadiazo" en el que la gente del Rojo fue a llenar la popular del Libertadores de América mientras el plantel terminaba con la rutina de entrenamiento. Luego, algunos hinchas se dirigieron hasta el hotel Intercontinental, donde concentra el equipo, para hacer aún más afusivo el apoyo.
Pero también estuvieron quienes siguieron la ronda de festejos y terminaron en el hotel donde se hospeda el equipo brasileño. Allí sonaron bombos, petardos y fuegos artificiales que duraron casi hasta el amanecer, con la idea era perturbar la tranquilidad y el sueño de los muchachos del Goiás.
Publicar un comentario
Publicar un comentario