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El censo podría haber dado lugar a una pregunta extra en el extenso formulario. Quizás muchos podrían empezar a responderlo antes de ingresar al Libertadores de América, para no seguir perjudicando al Rojo.

Hoy fue día de censo en la Argentina. Las preguntas que se hicieron no sólo tenían por finalidad conocer la cantidad de habitantes, sino también las condiciones de vivienda, salud, educación y conformación de hogares, entre otras cosas.

Siendo un país tan futbolero el nuestro debería haberse aprovechado, además, para consultar de qué club es hincha cada uno. Quizás sea una alternativa para la próxima ocasión, como sugería nuestro amigo Eduardo Cantaro (el próximo miércoles su último libro, Historias mundiales, será declarado de Interés Deportivo y Cultural por la Legislatura de la Ciudad).

No estaría de más, mientras esperamos los diez años que nos separan de la próxima compulsa nacional, hacer una autocrítica dentro de la tribuna del Rojo, sobre todo viendo los últimos antecedentes de violencia que se dieron en el Libertadores de América.

Y como en nuestra última editorial, la pregunta nos vuelve a surgir después de haber visto el accionar de los hinchas Rojos ante Boca. ¿Que los hinchas visitantes agredieron a la platea Sur? Es cierto ¿Qué nadie hizo hincapié en esto? También lo es. ¿Eso exime de culpas a quienes pretenden querer a Independiente y lo perjudican con riesgos de clausura del Estadio, con todo lo que ello implica deportiva, política y económicamente? Por supuesto que no.

El folclore del fútbol está muy alejado de lo que hemos vivido ante Defensor Sporting y Boca, y deberíamos concientizarnos de eso.

Emiliano Penelas

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