La próxima, cocodrilos y leones

<em>No hubo caso. El Rojo colocó una malla de seguridad, seguridad en la baranda y amplió el pulmón con la Garganta del Diablo. Sin embargo, pasó de todo. También hubo incidentes con algunos dirigentes de racing y entre los jugadores, al final.</em><br /><em></em><br /><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5443149215607412514" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgmiP3ofWs5xGfjZ4Upk6T4E8szMySaHDZWUrHwdtTkBJs-cPyANK-QX7d2EblOc6gXkdQYRakqQqXYmuRCKu5Ne401dpBFuCtSMiHQogd6BzqXEdfCwNM9aBNk5gHXW-T46aO_UJwQGDQ/s400/Visitante.jpg" style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; DISPLAY: block; HEIGHT: 268px; CURSOR: hand" />El primer clásico en el Libertadores de América era una prueba de fuego para la endeble seguridad que presenta desde la inauguración la tribuna visitante. A pesar de las reformas que hizo el Rojo, a pedido del Coprosede y por voluntad propia, los hinchas de racing tiraron cosas hacia abajo, saltaron el vallado y rompieron la lona y el alambrado sobre el final del encuentro.<br /><p>La pregunta que flotaba en el aire de quienes presenciamos esos desmanes era qué más habrá que hacer para frenar esa violencia irracional. Descartadas las ideas de armar un foso con cocodrilos y leones, alguien sugirió traer desde Orlando a la orca de <em>Sea World</em>... </p><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5443156190032569426" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhG5Ejvq_wM1wIQ5Zsc21U5O2bKhngHCqGPLFM4SzSDb07VHAaW5idml4ySkofeq0OTk3ulOM0JWJLedoVuy99uf9FdSHIdYOhlTEVYfmuH-l7lKxmlLqhWGb91zWugdAbElD_zrXpSAgc/s400/Visitante+seguridad.jpg" style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; DISPLAY: block; HEIGHT: 268px; CURSOR: hand" /><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5443149202729713330" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8GretE3V9R5Q8_lmPXQQQnX-9cXQeyrfzVVhwYCVHF9C7rdD1GtNmVirVgqdzl-2BeycfqJxdIVDfBeRtXd2sczJ_PJQgT8869b16zcEzwXOIfQQMtk45HcTWfm_U46nCfzgAkrS7nOU/s400/Visitante+disturbios.jpg" style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; DISPLAY: block; HEIGHT: 268px; CURSOR: hand" /><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5443149208001475074" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi8-SsyKZkgiTz-LrRm6JNUVlYcKqSvdDMAArrA9lN8DqRgqrzh2a_eUcI96zPRZfbjLC2hAFUn-BFxCXXAUkdQfd2NGa0I8uC2ZV31v6A1s_T2Vi0-31NYk_viFynldZ1QNsbI12offeU/s400/Visitante+disturbios+2.jpg" style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; DISPLAY: block; HEIGHT: 310px; CURSOR: hand" /><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5443149202288018450" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvkVJ9TK6ZUfBqNA-Q9LuFV7Lt3UFrLRfFoFs-7DtNYdwsehul_qUzItDaDhaE5IhndS_id0HAZkzvl60Yk3eRXS5ufcNa0Uqu2uOZFqVAlTlchS3cfMOKeJIWiN-5zM9Q7JPbSQw_0Dc/s400/Visitante+disturbios+final.jpg" style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; DISPLAY: block; HEIGHT: 268px; CURSOR: hand" /><strong><span style="font-size:130%;">Líos en la manga<br /></span></strong>Al término del partido no sólo hubo incidentes en las tribunas de racing, sino también en el camino a los vestuarios, entre los jugadores. Según trascendió, algunos hombres de Independiente venían cantando como la hinchada eso de "se van para la B". El central de racing, Lucas Aveldaño, se cruzó con Gracián y Acevedo, aunque no pasó de un tumulto.<br /><p>Previo al clásico también hubo encontronazos entre dirigentes de la academia e hinchas del Rojo, cerca de los palcos donde fueron ubicados los visitantes.</p>

La próxima, cocodrilos y leones

No hubo caso. El Rojo colocó una malla de seguridad, seguridad en la baranda y amplió el pulmón con la Garganta del Diablo. Sin embargo, pas...

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Sufriendo también se goza

<p><em>El Rojo le ganó a racing 2 a 1 y mantiene la enorme paternidad en el clásico de Avellaneda. El equipo de Gallego tuvo un muy buen arranque, pero le perdonó la vida a la academia y terminó padeciendo los últimos minutos. Igual, la alegría no tiene fin.</em><br /></p><div align="center"><em></em> </div><div align="center"><em><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5386291507583632674" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjHPHtOOfn7f0Jhd9RVZcQCZVWs71Mg97Srzzhyphenhyphensv_mE-QYCRltIdhG_giU0a0j13TgLYhSVQpvCDU3TFZxTS70m08O0d1drGYinOsqLYpggyc9_WlJmU7OTHTTzQnsADCO2t3hisDZlkY/s400/Final.jpg" style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; DISPLAY: block; HEIGHT: 227px; CURSOR: hand" /></em><em><span style="font-size:85%;">Final del partido: otra vez será, academia...</span></em></div><p>Primero hay que saber sufrir, y de eso sabemos... ¡y cómo! Pero después el goce es incomparable. </p><p>Independiente fue mucho más que racing, un equipo sin ideas ni fútbol que puso tesón en la segunda parte y hasta pudo haber conseguido un inmerecido empate, pero que debió haber caído por un resultado mucho más holgado. El Rojo sigue perdonando a sus rivales, como a Vélez la semana pasada, como a la academia en un primer tiempo que debió haber finalizado, por lo menos, con tres goles de ventaja arriba.</p><p>El equipo de Gallego se puso en ventaja casi desde el vestuario. Una buena corrida de Busse por la derecha del ataque, centro atrás y la aparición de Gandín, endiablado y en racha con el arco, abría el marcador. Con una muy buena labor de Piatti y Acevedo, más la colaboración desde el fondo de Matheu y Mareque, en uno de sus mejores partidos en el Rojo, racing no hacía pie y se veía sobrepasado en todas sus líneas.</p><p>Es que aquel gol tempranero demolió las primeras expectativas de los muchachos de Caruso, que salieron a esperar el partido y tuvieron que replantear el esquema. Obligado a salir, racing dejó muchos espacios en el fondo y el Rojo aprovechó el contragolpe. </p><p>Una gran escapada de Mareque, en posición de 10, entrando al área luego de un rebote y una pared, terminó en el penal que le cometió Aveldaño, casi a la media hora de juego. El Chipi tomó la pelota y no perdonó. El 2 a 0 era un resultado justo para un Rojo que era claro dominador. Lo pudo empatar racing con un cabezazo que dio en el travesaño, pero pudo aumentar también Independiente si no hubiera malogrado tantos contragolpes. </p><p align="center"><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5386301733245590098" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgh5XEgUuuthIqZqFJEX27fREQc-_VuhF-1qi9tesI10PtxOiGY8Pi1Pd_tU-rsCvZntsduwyUsmt1B040t3l7YBwDSrH1HuPuOdVpnmk1yvuxozGQrUSxWEMvs0gyGkDjxshjUNftTsa8/s400/Penal.jpg" style="TEXT-ALIGN: center; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; DISPLAY: block; HEIGHT: 261px; CURSOR: hand" /><em><span style="font-size:85%;">Darío Gandín y el penal que sería el 2 a 0 para el Rojo</span></em></p><p>En el segundo tiempo racing salió empujado por los 5 minutos en que su hinchada se dedicó a cantar. Y el polifunciomal Ledesma, que vino a cumplir la "ley del ex", justo se encontró con un gol a los 3 minutos de comenzada la etapa. La academia se fue al ataque, el Rojo perdió terreno y ya no mostraba tantas piernas para el contragolpe. Gallego se desesperaba en el banco pidiendo contención y ayuda para Acevedo, que sólo no podía en el medio, y allí apareció gigante la figura de Matheu, bien apoyado por Galeano, y creció aún más Mareque.</p><p>Si bien racing pudo haber alcanzado la igualdad, el Rojo volvió a contar con el empuje de Gandín y un par de llegadas que pudieron haber liquidado la historia, y que fueron mal resueltas en los últimos metros. Sin embargo, aún en la confusión de esos últimos minutos, Independiente intentó poner la pelota al piso y jugarla con tranquilidad.</p><p>Claro que el final del partido fue un desahogo grande y casi la certeza de que no nos ganan nunca más. </p><p>Emiliano Penelas</p>

Sufriendo también se goza

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