El Rojo se sacó la mufa de encima y goleó a Platense 3 a 0 en Avellaneda. Ávalos, Loyola y Millán, la figura del partido, los goles.
Independiente cumplió con la fecha postergada ante Platense y bajo la lluvia se desahogó y consiguió su primera victoria tras 117 días de sequía. Enfrente tenía a un Platense que más allá de ostentar aún la corona de último campeón, viene muy golpeado.
Más allá del abultado resultado, el Rojo no brilló pero se pudo sacar de encima una mochila pesadísima en la que sumó 15 encuentros (siete empates y ocho derrotas), tomando en cuenta todas las competiciones.
Una potente silbatina recibió a los futbolistas del Rojo, en una tarde que comenzó muy adversa, con reclamos de todo tipo para un plantel que aún con el triunfo sigue siendo último en el Clausura: “Jugadores perdedores, respeten la camiseta”, decía una bandera mientras los cantos iban también hacia la dirigencia.
Ávalos, que volvió a la titularidad en lugar del inexpresivo Pussetto, abrió la cuenta rematando desde el suelo, pero mientras se festejaba caía alimento para perros desde la Santoro baja. Todo un mensaje para el plantel.
Cabral se erró un gol imposible, y salió en el entretiempo, dejando su lugar a Loyola, que anotará el 2-0 en la segunda mitad. Por último, ya cerca del final, fue la figura del partido, Lautaro Millán, quien puso el tercero para la goleada.
Emiliano Penelas
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