El Rojo jugó un gran primer tiempo en La Paternal pero no supo definir las muchas situaciones que tuvo y pagó el esfuerzo en el segundo. Fue 0 a 0.
El primer tiempo fue Todo Rojo, pero de los que esta noche vestían de blanco. Porque Independiente primer sonaba a Argentinos en la salida, no lo dejaba jugar, ahogaba su mediocampo y conseguía anular las intenciones del equipo de Guede de salir jugando desde abajo.
También falló muchísimo en la definición, porque en esos primeros 45 minutos los de Tevez deben haber tenido al menos cuatro o cinco ocasiones de gol clarisimas, tres de ellas en los pies de Federico Mancuello, que en la primera reventó el travesaño y en la última definió de la peor manera posible cuando frente al arquero Arias eligió picarla y entregársela a las manos.
También el Chaco Martínez, de gran primer tiempo, tuvo la suya desde afuera del área, y Matías Giménez un cabezazo que Arias sacó en la línea. El Bicho estaba perdido, su gente pedía más y recién sobre el final de la etapa llegó con dos claras qué anuló Rey.
En la segunda mitad la historia cambió. No fue toda de los Bichos Colorados pero sí dominaron la posesión y anularon la idea ofensiva de Independiente, que pareció sentir el esfuerzo de la primera parte y se replegó buscando la contra.
Tevez apenas hizo dos cambios, Laso se terminó convirtiendo en la figura y el partido se terminó jugando sin chances claras de gol. Con el correr de los minutos, a ambos pareció conformar el empate y así se cerró la noche.
Emiliano Penelas
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