Poco y nada

Independiente no pudo ante Central Córdoba de Santiago del Estero y terminó empatando 1 a 1 con gol de Roa. En la precia del Clásico de Avellaneda, el Rojo jugó muy mal y dejó pasar la chance de acercarse a los puestos de clasificación. 

Un primer tiempo pobrísimo, con muy poco para analizar, apenas una llegada en la que Leandro Fernández se saca de encima a un defensor y define mal cruzado al primer palo fue todo lo que se vio de Independiente ante Central Córdoba. El Rojo tuvo la pelota, jugó en campo del Ferroviario, pero no generó nada. El clima en las tribunas, previo al clásico, aportaba color, pero desde el campo de juego la respuesta era nula. 

En el entretiempo Domínguez cambió el esquema. Adiós a la línea de cinco defensores, afuera Laso, adentro Benegas. El equipo pareció sentirse más cómodo con esta formación, se adelantó en la cancha y generó una una buena combinación que comenzó en los pies de Batallini, centro de Togni y Roa, de arremetida abajo del arco anotó el primero. 

No obstante a los 13 minutos una desinteligencia del fondo, otro centro, una pifia, el arquero que no sale, Togni que no despeja y González Metilli empata en casi la única ocasión de la visita. El gol anuló todo lo que pudo haber planeado el entrenador en los vestuarios porque el Rojo ya no volvió a tener el ímpetu del comienzo de la etapa e incluso por momentos fueron los santiagueños quienes manejaron el encuentro. 

Con el correr del reloj la impaciencia empezó a bajar de las tribunas, y también llegaron los cantos contra los dirigentes. Los últimos minutos tuvo a las once camisetas Rojas metidas en su campo, y la gente solo pidió ganarle a racing "cueste lo que cueste". 

Emiliano Penelas