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Debido a las fuertes lluvias caídas desde la mañana el plantel de Independiente no pudo entrenar según lo previsto, por lo que trabajó bajo techo. 

La mañana empezó con el cielo negro y el alerta meteorológico previendo una fuerte tormenta sobre la ciudad de Buenos Aires y alrededores. Y pasadas las diez comenzaron a cumplirse los pronósticos con creces, provocando un temporal que trajo consigo inundaciones y granizo.

Por eso, el plantel de Independiente, que tenía previsto realizar fútbol en el predio de Buenos Aires Football en Benavídez, debió suspender la práctica y trabajar bajo techo.

Mañana el Rojo entrenará desde las 14 hs. en el Estadio Libertadores de América, el jueves tiene previsto regresar al complejo de Matías Almeyda y el viernes practicará en Sportivo Italiano.

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