El escritor uruguayo criticó el pobre nivel que hasta ahora mostró el Mundial y rescató sólo a Lionel Messi.

"Hasta ahora no vi mucho, buen fútbol no vi, salvo Messi, que por ahora, de lo que vi es lo que está salvando el Mundial de una mediocridad imperdonable, pero también son los primeros partidos, los equipos se miden, hay mucha tensión acumulada", indicó.
El autor de Las venas abiertas de América Latina casi rogó: "Quiero que me ofrezcan alguna linda jugadita, y ahí desaparece la camiseta, no me importa de qué club es, de qué es el jugador, que me hace ese favor".
"Hay una proporción de jugadores lesionados altísima, más de la habitual y algo ha de tener que ver con esta suerte de esclavitud bien pagada a la que están sometidas las figuras de fútbol", señaló.
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