Clásico partido de verano

En Salta, un entretenido 0 a 0, aunque sin dejar un típico partido de verano en el cual sobraron las asperezas e imprecisiones. A Gandín le anularon mal el gol de la victoria.

Inaugurando el Triangular de Salta en el verano futbolístico del norte, Independiente y racing igualaron sin goles en un partido que tuvo un poco de todo, en donde el Rojo mereció un poco más y hasta le anularon un claro gol a Darío Gandín.

Durante el primer tiempo se repartieron las llegadas, al principio la balanza se inclinaba un poco más del lado de racing, y a medida que transcurría el juego Independiente se hizo dueño de la pelota y tuvo las mejores chances.

El avance de racing se daba en los marcados errores defensivos y desatenciones típicas de un primer partido estival. La floja tarea de Vella por derecha obligaba a Busse a bajar demasiado, y el Rojo se debilitaba en el mediocampo. Buena tarea de Tuzzio, finalmente el mejor de la noche, y también un aceptable trabajo de Acevedo, siempre prolijo con la pelota al piso. Fredes aportó poco, y Gómez fue escurridizo para la defensa académica.

Las oportunidades durante la etapa inicial fueron a través de Steinert y Lucero, en racing, con una intervención en dos tiempos de Gabbarini y un rechazo sobre la línea de Tuzzio. Para el Rojo, una excelente jugada de área a área del central más veterano, que eludió al arquero y definió sin precisión por encima del travesaño. Un cabzazo de Vittor, luego de una mala salida de Santillo, pudo haber sido la apertura para el Rojo sobre la hora.

En la segunda parte siguió siendo Independiente quien manejó la pelota con más prolijidad. El ingreso desde el vestuario de Patricio Rodríguez e Ignacio Piatti agregaron algo de velocidad de tres cuartos hacia adelante, siempre dentro del contexto veraniego que venimos remarcando.

Creció la labor de Acevedo y el Chipi Gandín siguió mostrando potencia y habilidad para arreglárselas a veces demasiado solo. Precisamente entre los dos vino la jugada que debió ser la victoria del Rojo. Un tiro libre potente del volante central cruzó todo el área y por detrás apareció el goleador para mandarla a la red. Insólitamente, el línea levantó el banderín y Pezzotta dejó sin festejo a Independiente.

Emiliano Penelas