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Ajustada mirada de Juan Pablo Varsky sobre el conflicto que envuelve al fútbol argentino.

"El problema es que la televisión no pone más plata", ha dicho Julio Grondona. El presidente de la AFA le pide $ 12 por abonado a Televisión Satelital Codificada (TSC), la empresa que tiene los derechos del fútbol de primera división. A cambio, le ofrece eliminar los codificados. "Con esa plata solucionamos todo", repite en cada aparición mediática. La cuenta no es antojadiza. En la Argentina hay aproximadamente 5.600.000 de suscriptores al cable. Multiplicando el número de abonados por esos 12 pesos que reclama Grondona, el resultado da 67,2 millones por mes. La cifra anual llegaría a $ 806.400.000. Hoy, la deuda total de los clubes se acerca a los $ 700 millones. Solamente a la AFA le deben 340 millones. La AFIP ya presentó documentación por $ 300 millones de obligaciones incumplidas. Los bancos también tienen saldos a cobrar. Por ejemplo, según el registro del Central al período 04/2009, Independiente le debía al Banco Macro 4.738.100 pesos y 3.605.400 al Mariva. Con activos como garantía, River asume un rojo con el Credicoop de 16.451.000 pesos. Los empleados de UTEDYC (Unión de Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles) demandan salarios atrasados por 12 millones. Y, por supuesto, incluimos los 30 millones de pesos (originalmente 40 millones) que reclama Futbolistas Argentinos Agremiados. La situación es terminal. Desesperadamente, Grondona busca una enorme inyección de dinero que saque a los clubes de la ruina y, de paso, correr el arco del debate. Quiere instalar la discusión de que el verdadero problema es el poco dinero que recibe y así gambetear el foco más negativo para su gestión: las malas administraciones y el nulo control que ejerció la Asociación del Fútbol Argentino sobre los balances de los clubes. En la nota "A una década del pacto fantasma" publicada el lunes 27 de julio, se explicó cómo la AFA no hizo absolutamente nada para auditar los movimientos de las instituciones, a pesar de la promesa de castigos deportivos. Los operadores de cable rechazaron la idea de Grondona y aseguran que el negocio no ofrece margen para semejante aumento. En España el abono cuesta US$ 45,5, con un PBI 4,5 veces mayor. En la Argentina, el precio es de US$ 29. También reaccionaron los propios suscriptores que no quieren pagar un adicional para solucionarles el problema a los clubes. TSC le ofreció a la AFA adelantarle el dinero para pagar la deuda con Agremiados y así destrabar el comienzo del campeonato. Hasta ahora, no hay acuerdo.

A partir de la temporada 2009/10, la televisión le pagará a la AFA 268 millones de pesos: 14 millones por los derechos de Fútbol de Primera (la AFA cobra por darle la exclusividad al programa), otros 14 millones por la Primera B, 28 millones por la Primera B Nacional y 212 millones por los diez partidos del campeonato argentino. Cinco se emiten por el abono básico (TyC Sports) y cinco por el sistema codificado (TyC Max). Hoy, 800.000 suscriptores pagan el codificado, un 15 % del total de los abonados al cable. En 2007, la TV pagaba 93 millones y no transmitía todos los partidos. Ese año, el contrato, que vence a fin de la temporada 2013-14, fue renegociado. Desde entonces, el monto que recibe la AFA se actualiza periódicamente por un coeficiente llamado Tarifa Nacional Básica (TNB). Si aumenta el abono del cable, también suben los ingresos de la AFA. Desde 2007, la tarifa del cable aumentó un 41 %. Socia en el fútbol de primera división con el 50 % de las ganancias y con ese piso garantizado de 212 millones, la AFA recauda el dinero y lo distribuye de acuerdo con su criterio jerárquico avalado por los clubes. River y Boca están en el primer grupo; San Lorenzo, racing, Independiente y Vélez, en el segundo; el resto de los equipos, en el tercero; y los recién ascendidos, en el último. Esta centralización se replica en Inglaterra, Francia y Alemania. Italia lo hará desde 2010. Sólo España fragmenta la venta de derechos según cada club. Así, Real Madrid recibe 130 millones de euros contra 12 millones de Almería, casi once veces más. Aquí la diferencia entre los que más cobran y los que menos cobran es de 3.5, un registro más equitativo. El fútbol argentino no interesa en el extranjero. Se recaudan solamente 3 millones de dólares por año en materia de derechos. La diferencia horaria, los cambios de programación, los estadios en mal estado, la falta de figuras y el nivel de los espectáculos explican el desinterés. En la Argentina, la torta publicitaria total (sumando TV abierta y de cable) es de US$ 288 millones contra los 2600 millones de México, por ejemplo. Al tener un número tan reducido, es el cable, con sus ingresos por abonado, el que financia la gran mayoría de los contenidos deportivos. Es difícil programar deporte en TV abierta porque no hay manera de cubrir los costos con la publicidad. Canal 7 paga 6 millones de pesos anuales por la transmisión de un partido de primera división. Al tratarse de un canal estatal, lo incorpora como un servicio a la población y tiene una relación costo-beneficio diferente a la de un canal privado. En Brasil, la torta publicitaria es de US$ 2000 millones, siete veces más que aquí. La TV brasileña paga US$ 200 millones por los derechos, casi tres veces más. La Confederación Brasileña de Fútbol coparticipa con los clubes el 100 % de los derechos de los torneos locales y se financia con los derechos de la selección.

En cambio, la AFA maneja la caja. Les presta dinero a los clubes en problemas. "Fui demasiado bondadoso", dice Grondona. Lo que no dice es que así construye su poder. ¿Alguien votaría en contra de una persona que le presta plata, no controla en qué la gasta y no exige plazos de devolución? Ahí están las votaciones para Don Julio, todas por unanimidad y aclamación. No todos los clubes están mal administrados. Lanús es el ejemplo de eficiencia. Pero al mejor equipo de la temporada 2008/09 se le va el 50 % de sus recaudaciones como local en los operativos de seguridad. River paga 1.400.000 pesos por año por el mismo concepto. Estudiantes, otro club ordenado, sólo gana plata como local contra los grandes o en el clásico ante Gimnasia. Se estima que, entre todos los clubes, pagan no menos de 15 millones de pesos por año en seguridad. La prestación suele venir con operativos inflados y sin tareas de inteligencia. En el resto del mundo, la seguridad la paga el Estado. Hay clubes que financian actividades sin rentabilidad, desarrollan colegios y se comprometen con el barrio. Deben cubrir ese déficit con ingresos futboleros. No pueden aumentar la cuota ni la entrada, sobre la que pagan IVA. Hasta acá, los atenuantes. Sin embargo, Boca utiliza el 36,6 % de los ingresos de TV para pagarle a un solo futbolista (Riquelme). Rosario Central le pagó medio millón de dólares a un entrenador por quince partidos (Russo). Independiente llegó a tener ¡52 futbolistas profesionales! entrenándose en su predio. La mayoría de los clubes traza presupuestos deficitarios a cubrir con ventas de jugadores. El argumento repetido por los directivos es que ellos "administran pasión" y que temen ser atacados por los socios-hinchas si no cumplen con su pedido de traer jugadores. Débiles para poner límites, aceptaron todas las condiciones impuestas por los futbolistas, los representantes, los intermediarios y los grupos empresarios. Pero siempre estuvo Grondona, dispuesto a prestarles dinero a cambio de levantar la mano en el comité ejecutivo. En esta trama de malas administraciones, socorros con dinero y delegación de poder, se descubre el verdadero problema del fútbol argentino.

Juan Pablo Varsky
Diario La Nación, jueves 6 de agosto de 2009

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Anónimo dijo... 6 de agosto de 2009, 9:09 p.m.

Adivina adivinador... ¿quien le paga el sueldo a Juan Pablo Varsky?, ¡siempre lo veo en los programas del canal de Directv! (Directv es socio del Grupo Clarin, socio de TyC y todos juntos hacen lobby para que nadie mas -Antina TV, por ejemplo-se les meta en el negocio, que ellos dicen que no es negocio...)
Cuando a uno no le cierran las cuentas en su negocio lo cierra y se dedica a otra cosa, ¿porque TSC sigue, es para hacernos un favor?. ¿Con que derecho se meten a decirle a la AFA lo que tiene que hacer? ¿alguno de nosotros le dice a sus proveedores como tiene que administrarse?
Decir que "los ingresos de publicidad no cubren los gastos" es un chiste de muy mal gusto. Les recuerdo que en las programaciones por cable NO DEBERIA HABER PUBLICIDAD DE NINGUNA ESPECIE porque precisamente para eso se cobra abono y TyC cobra el abono, cobra un paquete aparte de futbol (es decir que cobra 2 veces el mismo producto: futbol)y encima pisa los partidos con una publicidad atras de otra sin contar las estatica de los estadios y la de las camisetas (por eso no dejan q los jugadores se las levanten). Si no les conviene que se lo dejen a canal 7 que tuvo que arrancarle de entre los dientes el partido mas insignificante de la semana.
El costo y la modalidad de venta de un producto lo fija el dueño del producto y el dueño del futbol es la AFA.
PD.: los costos de seguridad corresponden al Estado que para eso son los impuestos.
PD2.: ¿Independiente solo debe 3 millones de dolares a los bancos?

La Caldera del Diablo dijo... 6 de agosto de 2009, 11:27 p.m.

Weimer: es cierto que muchos de los que están criticando a la AFA tienen intereses con la televisión, el periodismo, acá, está igual de corrompido que en todas las demás áreas. Es cierto que el cable cobra su abono supuestamente para evitar la publicidad, y es cierto lo de TyC y su doble, triple o cuádruple negocio, porque no nos olvidemos que el partidito que transmitieron hoy le cubre horas y horas de programación de aquí a la eternidad, si tomamos en cuenta los refritos de "grandes partidos" y cosas así.
Lo que no deja de ser cierto tampoco es que la AFA malvendió en su momento los derechos de transmisión, que avaló todos los despropósitos de la TV y que de alguna manera entró en su mismo negocio como socia, que tiene un presidente que se mantiene desde hace más de 30 años atravesando dictaduras y ¡nueve! presidentes democráticos y que a veces parece el discurso de Kirchner contra Clarín, cuando el que les dio el maíz para engordarlo se queja del chancho malo.
En fin, la idea es discutir estos temas, y no cerrarnos sólo en la pelotita.
Un abrazo, como siempre

Emiliano