Assmann vuela para callarle el grito a los bosteros
No fue como aquella tarde en la que Luis Islas sacó todo lo que caía en su área y bajo sus tres palos cuando la cancha de Boca se doblegaba ante el 1 de Independiente y el Rojo se iba ganador gracias a una jugada de Mohamed y gol de Garnero, a pesar de haber sido cascoteado todo el encuentro.
Sin embargo, lo de Fabián Assmann fue más que meritorio, aún cuando -lo señalamos en el comentario y lo vemos en los partidos- le costaron mucho los centros. Un par de contenciones con seguridad, sin dar rebote y mostrando su categoría en remates de media y larga distncia, pero también en el mano a mano, hicieron que el arco del Rojo estuviera bien cubierto.
"Creo que fue mi mejor partido", admitió el arquero. "Más allá de que fue un empate, uno sabe cómo le fue por las situaciones y por las pelotas difíciles. Me voy muy contento."
La frutilla del postre, la atajada del partido, vino luego de un cabezazo de Viatri cruzado, a contrapierna, que con una mano despejó al corner de manera espectacular. "La del cabezazo fue buena porque estaba pasado, la alcancé a tocar y salió. También fue complicada la que, al principio, me pega en el pecho y el remate de Riquelme de afuera del área", señaló.
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En líneas generales fue una actuación muy buena. Pero todavía alterna algunas dudas.
Abrazo
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