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En la vuelta al fútbol oficial, Independiente derrotó a Atlético Tucumán por 1 a 0 en el Libertadores de América. Al Rojo no le sobró nada, y hasta jugó casi todo el segundo tiempo con un hombre más, pero a partir del triunfo podrá planificar el partido de vuelta como visitante. Silvio Romero, de penal, el gol.  


No se vio mucho, pero había mucho que no veíamos al equipo jugar por los puntos. No deslumbró pero tampoco lo pasaron por encima, pero pese a tener un hombre de más casi todo el segundo tiempo, no supo sacar ventaja de la situación. Entre las luces y sombras de la noche en Avellaneda, el Rojo se queda con el triunfo, y por ahora alcanza.

Pasaba poco en el primer tiempo hasta que llegando a la media hora Federico Martínez se metió en el área y recibió un tremendo foul de Cabral que el árbitro vio claro penal. Silvio Romero tomó la pelota y la colocó inalcanzable para Luchetti. 

Poco tiempo después fue Sosa quien hizo su presentación en el Rojo sacando una pelota providencial que tenía destino de red. En tres minutos pasaba lo más emocionante del primer tiempo, y casi podríamos decir de todo el partido. 

Cuando Independiente fue un equipo corto, de pases breves y con circulación, marcó presencia en ataque, pero se le complicó al cubrir los espacios, y Atlético, con velocidad, lo complicó mucho. Incluso con diez hombres, ya que apenas comenzada la segunda parte se fue expulsado Carrera en el Decano.

No vimos todavía un sentido de equipo. Se vieron atisbos, algo de voluntad en Alan Velasco para encarar y molestar siempre, pero está claro que el funcionamiento no es el esperado y se irá viendo con el correr de los minutos y con resultados.

Gol de penal, buenas apariciones de Bustos y Hernández, buena presentación del uruguayo Sosa y bien también su compatriota Federico Martínez. Pobre lo de Lucas Romero, se sintió muchísimo que el Rojo sigue sin marca en el mediocampo. 

Lo positivo: Ganó el Rojo, no le hicieron goles. No va a ser fácil la vuelta en Tucumán, pero hay que jugar con inteligencia para hacer pesar el resultado de la ida, y eventualmente un gol en el José Fierro que obligue al local a convertir más.

Emiliano Penelas

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