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Con momentos de muy buen fútbol, y bajo la tensión típica de una final, Independiente derrotó al Flamengo 2 a 1 en Avellaneda. El Rojo empezó perdiendo a poco de comenzar el partido, pero lo dio vuelta con goles de Gigliotti y Meza. La revancha, en una semana en el Maracaná.


Independiente se quedó con el primer tiempo de esta final de 180 minutos por la Copa Sudamericana, al derrotar al Flamengo por 2 a 1 con goles de Gigliotti y Meza, en un partido jugado a nervio y tesón, pero con momentos de muy buen fútbol, sobre todo para remontar el resultado.

Porque el Rojo comenzó perdiendo a los 8 minutos, y el baldazo de agua fría impactó en el marco espectacular que se dio en el Libertadores de América. Los Cariocas se agrandaron y se adueñaron del juego, sobre todo a través de las pelotas paradas. El conjunto de Holan empezó a remontar de a poco y a fuerza de fútbol e intensidad llegó al empate a través de Emmanuel Gigliotti. El Puma tuvo una gran noche, que se hilvana con lo hecho en momentos decisivos de la Copa. El goleador apareció cuando más se lo necesitaba.

El momento del Rojo se prolongó al comienzo de la segunda parte, cuando se vio lo mejor del equipo de Avellaneda. Velocidad, precisión y un juego intenso llevaron a Meza a definir una gran jugada que puso arriba a Independiente.

Con el 2 a 1 el Rojo bajó un poco la intensidad, se desgasto y Flamengo aprovecho la ocasión para subir metros en el terreno de juego y adueñarse de la pelota. Se sufrió sobre el final, pero así son las finales y también se festejó el triunfo, por supuesto. Quedan 90 minutos, en el mítico Maracana donde el Rey de Copas supo celebrar hace 22 años.

Emiliano Penelas

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