Dirigentes del Club pudieron frenar el remate y tras abonar un porcentaje de la deuda lograron el compromiso de continuar negociando.
Esta mañana estaba pautado el remate de la Sede Boyacá de Independiente, a raíz de la deuda contraída por la compra de Hilario Navarro a Jaime Perkul, en 2008, quien a su vez vendió a la misma a un fideicomiso. La situación llegó al extremo de perder el juicio correspondiente y comprometer una de las más preciadas instalaciones del Rojo.
Por eso Noray Nakis, Héctor Maldonado, Gustavo Álvarez, miembros de la Comisión Directiva del Club, se hicieron presentes en el Colegio de Martilleros de Lomas de Zamora, en donde abonaron un porcentaje del monto para poder frenar el remate y tener un plazo para continuar la negociación.
Esta mañana estaba pautado el remate de la Sede Boyacá de Independiente, a raíz de la deuda contraída por la compra de Hilario Navarro a Jaime Perkul, en 2008, quien a su vez vendió a la misma a un fideicomiso. La situación llegó al extremo de perder el juicio correspondiente y comprometer una de las más preciadas instalaciones del Rojo.
Por eso Noray Nakis, Héctor Maldonado, Gustavo Álvarez, miembros de la Comisión Directiva del Club, se hicieron presentes en el Colegio de Martilleros de Lomas de Zamora, en donde abonaron un porcentaje del monto para poder frenar el remate y tener un plazo para continuar la negociación.
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