En el inicio de la Copa Sudamericana, Independiente volvió a jugar mal, pero pudo rescatar un empate en la cancha de Arsenal, al igualar 1 a 1 y dejar la serie abierta para definir en Avellaneda. Los de Pellegrino llegaron al empate por medio de Vitale.
Disgusto, frustración, malhumor. Eso conjugaban los hinchas de Independiente cuando se jugaba más de una hora de partido en el Viaducto y el pobre y mezquino Arsenal no podía ser vulnerado por un plantel que en nombres es muy superior pero que en el juego viene decayendo desde hace varios juegos, en un síntoma preocupante.
Lértora había abierto la cuenta para los de Caruso Lombardi con un golazo impresionante tras agarrar un rebote de afuera del área y clavarla en un ángulo del Ruso Rodríguez. Iban 32 minutos de la primera parte. Todo mal hacía el Rojo, que no lograba congeniar dos pases seguidos ni llevar peligro al área rival.
En la segunda parte el ingreso del Cebolla Rodríguez le dio otra vitalidad al mediocampo, y cuando iban 25 minutos Julián Vitale fue quien se encontró con otro rebote pasando la medialuna y sacó un disparo seco, rasante, para su primer gol en el fútbol grande y el empate de Independiente.
Ahora el Rojo definirá en el Libertadores de América con la ventaja del gol de visitante a favor, pero deberá mejorar mucho su juego si quiere seguir con vida en la Copa.
Emiliano Penelas
Disgusto, frustración, malhumor. Eso conjugaban los hinchas de Independiente cuando se jugaba más de una hora de partido en el Viaducto y el pobre y mezquino Arsenal no podía ser vulnerado por un plantel que en nombres es muy superior pero que en el juego viene decayendo desde hace varios juegos, en un síntoma preocupante.
Lértora había abierto la cuenta para los de Caruso Lombardi con un golazo impresionante tras agarrar un rebote de afuera del área y clavarla en un ángulo del Ruso Rodríguez. Iban 32 minutos de la primera parte. Todo mal hacía el Rojo, que no lograba congeniar dos pases seguidos ni llevar peligro al área rival.
En la segunda parte el ingreso del Cebolla Rodríguez le dio otra vitalidad al mediocampo, y cuando iban 25 minutos Julián Vitale fue quien se encontró con otro rebote pasando la medialuna y sacó un disparo seco, rasante, para su primer gol en el fútbol grande y el empate de Independiente.
Ahora el Rojo definirá en el Libertadores de América con la ventaja del gol de visitante a favor, pero deberá mejorar mucho su juego si quiere seguir con vida en la Copa.
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