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Cumpliendo con lo prometido tras el ultimatum de 48 horas, los empleados de Independiente realizaron un cese de actividades en todas las sedes y predios del Club. El plantel debió entrenar en otro lado.

Los empleados de Independiente reclaman deudas en los pagos de sus salarios por cerca de 2.800.000 de pesos. Por eso, y tras haber intimado a que se cancelaran los compromisos esta semana y por eso realizaron un paro en las Sedes de Mitre, Boyacá y los predios de Wilde y Villa Domínico, por lo que el plantel debió entrenar en canchas de sintético.

El presidente Javier Cantero explicó a la agencia Télam: "Los empleados cobraron sus sueldos hoy, con 72 horas hábiles de retraso, ya que debíamos abonarles el pasado viernes. Sin embargo, por ese breve atraso resolvieron igual llevar adelante una retención de tareas, apoyados por el gremio de Utedyc".

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