1
Sin ideas, y con un juego muy limitado, Independiente apenas pudo empatar, y de carambola, con un All Boys que hizo su negocio. Clima de desazón en el Libertadores de América.

El banderazo de la tarde no aportó nada. La gente no pudo contagiar a un equipo al que no le sale una y tampoco juega a nada. Un equipo tímido, incapaz de generar peligro en campo rival y que ni siquiera puede absorber la presión que se cierne sobre sus cabezas.

¿Como juega un equipo que se esta yendo a la B y no ofrece respuestas ni anímicas ni futbolisticas? Miren 25 minutos de cualquier partido de Independiente. Miren como no hay un centro que termina en la cabeza adecuada, como todas las salidas del arco se pierden en el revuelo del medio, como todos los errores son posibles jugadas de riesgo en contra.

Excesivamente cauteloso por momentos, All Boys solo buscaba el punto, pero por insistencia e impericia del local llego al gol tras muchas situaciones al limite del off side. El fin del mundo, o algo parecido, caía sobre Avellaneda. No habia reacción, y las pocas chances que se tenian eran increíblemente desperdiciadas.

De pronto, un rebote caprichoso, el travesaño que niega el gol en primera instancia y Farias, sin fe, sin ese olfato goleador siquiera, la mete pidiendo permiso, con la tibia o vaya a saber que parte del cuerpo alejada del empeine. El empate matizo un poco el final, que parecía heroico pero ni eso. Un punto, quonce fechas sin ganar. El tobogan cada vez mas empinado.

Emiliano Penelas

Publicar un comentario

Walter dijo... 23 de septiembre de 2012, 10:53 p.m.

¿Para cuando la bandera que diga "perdón Christian Diaz"?
La actitud mezquina de la dirigencia de no traerle refuerzos a Ramón Diaz pq lo habia contratado Comparada ¿perjudicó al técnico o a Independiente?.
Donde vemos humo vamos y lo compramos.