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Independiente, sin nada que jugar en la fecha 19º del Clausura, será juez del destino del Globo, que pelea por zafar del descenso directo. Y tiene que salir a ganar.



Como señaló el propio técnico de Independiente, si Huracán desciende no será culpa del Rojo ni de Mohamed, sino de una mala campaña de 114 partidos, en la que se acumularán responsabilidades de varios jugadores, cuerpos técnicos y dirigentes del Globo.

El Rojo ya le regaló tres puntos a los de Parque Patricios cuando luego de la obtención de la Copa Sudamericana fue al Ducó a jugar con un equipo cansado y sin ánimo de abordar ese partido. También dejó escapar valiosos puntos cuando entregó otro encuentro ante Tigre, postergado del torneo Apertura y jugado antes del comienzo del Clausura.

Independiente tiene 40 puntos en la temporada, apenas uno más de la peor campaña que se desprenderá de su promedio para la 2011/12, y sosteniéndose en la cosecha de 68 que supo lograr Américo Gallego. Con otro semestre en el que se impondrán viajes y competencias internacionales (la Suruga y la Recopa, además de defender la Sudamericana) es de esperar que con un plantel reducido nuevamente se abandone el torneo local. Todo punto que se deje escapar será vital para no padecer en el futuro lo que se sufrió este último semestre.

Sabemos que para Mohamed será doloroso enfrentar de esta manera al club de sus amores, que podría descender en el caso de empatar o perder y que Gimnasia logre una victoria frente a Boca. Pero también hay que decir que el Turco se debe a Independiente, el equipo que mantendrá bajo su cargo al menos hasta fin de año, y debería pensar en el éxito de este plantel, esta camiseta y estos hinchas que lo apoyaron incluso en los momentos de mayor flaqueza, cuando acumulaba derrotas y empates.

Entonces el sábado, a las 15, está claro qué tiene que hacer Independiente ante Huracán: salir a ganar.

Emiliano Penelas

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