Una lástima. Otra vez el equipo se encontró con la ventaja apenas se inició el partido y no pudo mantenerla. Es más, antes de los cinco minutos pudo liquidarlo, pero Silvera no estuvo fino. Al margen de chances desperdiciadas, queda muy claro que jugamos a lo que sale. No hay una línea de juego definida y entonces el conjunto no tiene una identidad para que el de enfrente se preocupe. Es más, si no fue por el benévolo de Baldassi, en el PT al vestuario llegaban nueve. Es que Godoy y el Cuqui fueron varias veces mal al piso y merecían la segunda amarilla. Con respecto a los 11 que empataron con Quilmes, sólo volvieron a jugar de entrada Hilario, Tuzzio, Matheu y Galeano. Los demás estaban descansaditos, pero en muchos pasajes del juego Godoy Cruz los superó físicamente a pesar de que Da Silva metió a los mismos del 2-0 frente a Lanús. Y es un tema que preocupa porque además en todos los partidos aparecen lesiones musculares. Para destacar la posición en el segundo tiempo de Silvera cuando Defederico salió. Metió cuatro asistencias que por la impericia de Fredes, Rodríguez (ayer entró Patito) y Parra, el Rojo no pasó a ganar. Gran mérito del DT en los cambios, aunque me gustaría saber por qué no tiene chances Leonel Núñez, que con su potente remate puede ser un arma importante. El punto dice poco y se sigue con chances de clasificar ganando los dos partidos que faltan. Igual, ahora hay que recuperar energías que antes de la Liga de Quito se vienen Banfield y Gimnasia en La Plata. Ahí no se puede fallar, muchachos.
Todavía podemos pasar
Beto Tisinovich
Diario Olé, jueves 24 de marzo de 2011
Publicar un comentario
Publicar un comentario