0
El delantero provocó a la platea Roja y se fue expulsado. Luego pidió disculpas en el vestuario. Andrés Silvera se las tuvo que ver con un perro.

A los 42 minutos del segundo tiempo, con el Rojo jugado al ataque, Pablo Mouche liquidó el pleito. Antes de ingresar, el delantero de Boca había recibido insultos desde la Erico Baja, con alusiones a la supuesta infidelidad de su novia con su compañero Juan Román Riquelme.

Claro, luego de convertir el gol Mouche se fue corriendo al centro de la cancha, arrojó su camiseta al suelo y comenzó a insultar a la platea, que reaccionó con vehemencia y se armó un escándalo que pudo haber pasado a mayores cuando expulsado por Laverni, el jugador Xeneize debía irse a vestuarios.

En el vestuario, más calmo, el juvenil pidió disculpas a la gente de Independiente.

Silvera y el perro
Nos acercábamos a la media hora del partido cuando un perro atravesó la cancha y se acostó cerca del área que defendía el arquero de Boca. Andrés Silvera fue el valiente que se acercó al pichicho, lo acarició y cargó en sus brazos para que un asistente lo sacara de la cancha. Aquí, la secuencia fotográfica.

Publicar un comentario