Godoy Cruz y Argentinos son los sorpresivos punteros; apremia Estudiantes, con sus pergaminos; Independiente, ahora, desde atrás.
Asad, Borghi, Sabella y Gallego
Con la ilusión de quedar en la historia
Godoy Cruz se armó para escapar del descenso. Y, de pronto, entre victoria y sorpresa, se encuentra ahí, arriba de todos. Cuando la media docena de goles contra Tigre ya era cuestión juzgada, el técnico Omar Asad –ese experimento devenido en el gran acierto del torneo– se emocionó, al límite de las lágrimas, cuando desde las tribunas del colorido Malvinas Argentinas, por primera vez, bajó el canto de la ilusión: "Que de la mano del Turco Asad todos la vuelta vamos a dar".
El DT conformó un plantel maduro, solidario. Suerte de continuidad, sin tantos valores superlativos, de aquel de Diego Cocca como entrenador y de Leandro Caruso, hoy en Vélez, en el ataque.
Godoy Cruz es un club sólido. Bien manejado desde la parte dirigencial y que hasta resultó airoso tras la desprolija llegada y salida de Enzo Trossero, que apenas dirigió los últimos seis partidos del pasado Apertura.
Tiene un buen arquero, como Nelson Ibáñez, de fugaz experiencia en el seleccionado local. Un volante que quita y juega, como Olmedo, y un delantero que revivió con goles: el otro Pipita Higuaín.
20 puntos tiene Godoy Cruz en la imaginaria tabla como local: también es el líder
DIXIT
"Hay un equipo maduro, responsable, que tiene amor propio y, en lo personal, estoy muy feliz. Creo que vamos a terminar entre los primeros cuatro equipos" (Omar Asad)
La gran virtud de saber a qué jugar
La verdad, no tiene nada que ver con aquel fantástico equipo de mediados de los ochenta, cuando Bichi Borghi, el hoy entrenador, brillaba de pantalones cortos. "El fútbol y toque de la Paternal", como reza la emotiva canción, no tiene relación directa con este sorpresivo equipo que alcanzó la punta. Pero posee una gran virtud este conjunto, que cambia de nombres pero no de estructura: sabe muy bien a lo que juega.
Tres defensores, generalmente zagueros; dos volantes de contención, los de siempre, los motores, Mercier-Ortigoza; dos carrileros, un enganche (o media punta) y dos delanteros, aunque Sosa suele bajar unos metros, para dejar en soledad a Calderón, el hombre que volvió del retiro por la capacidad de convencimiento de Bichi Borghi. Y hoy, casi a los 40 años, pelea por el título.
Para el DT es una suerte de volver a vivir, luego de la exitosa campaña en Colo Colo y su desafortunada tarea en Independiente. Los hinchas lo adoran. Y se entusiasman con un equipo que tiene a Oberman, ex delantero y hoy volante, como una suerte de grata revelación.
16 unidades cuenta Argentinos en la imaginaria tabla de visitante; es el mejor.
DIXIT
"Somos protagonistas y hay que sacar chapa para mantenerse. Estudiantes es complicado, pero nosotros no jugamos la Libertadores; eso es importante" (Claudio Borghi)
Es el mejor, pero juega la Libertadores...
Si Barcelona es el equipo, el club, al que el mundo del fútbol admira, Estudiantes bien tiene el derecho ganado de ser el ejemplo por seguir, al menos, en esta parte del planeta. La única mancha, tal vez, sea la sangrienta lucha de poder en el seno de la barra brava, un mal que gobierna en varios clubes. Delante, se muestra un club modelo, con gran infraestructura, buena vida social, un equipo de lujo, un gran cuerpo técnico y pergaminos a lo largo de la historia reciente.
Tiene al Príncipe Sosa, acaso, el mejor valor de nuestro medio. ¡Cómo juega! A Verón, todo un referente. Y a Boselli, el sello del gol. Y cuando no actúan estos dos últimos valores, como en el caso de la goleada contra racing, o cuando el equipo se transforma por el trajín entre lo local y lo internacional, la base sigue siendo vistosa y sólida. Claro que la Libertadores es la obsesión de todos. Es la prioridad. Y en el camino final, el León deberá decidir.
El desgaste será lógico. Aunque queda la decisión que, sin Libertadores a la vista, Estudiantes iría derecho hacia una nueva conquista doméstica. Habrá que esperar.
24 tantos marcó Estudiantes; es el equipo más goleador del torneo.
DIXIT
"De ahora en más vamos a jugar varios partidos seguidos, en el torneo y en la Copa, que van a ser definitorios. Tendremos que hacer un gran esfuerzo." (Alejandro Sabella)
Ahora aparecen los grandes equipos
Es una verdad que expone el fútbol de tanto en tanto: cuando un equipo gana y gana y, de pronto, frena su andar, allí es cuando debe surgir la personalidad. Para saber si se puede retomar la senda del éxito o, definitivamente, seguirán los tropiezos. En esa dirección anda Independiente, el equipo conducido por el verborrágico Tolo Gallego. Llevaba la delantera desde la octava fecha, el único grande del fútbol doméstico que entendió cómo encarar el certamen. Pero el juego nunca fue vistoso, se cayeron algunas piezas y las dudas transformaron la escena. Hasta hubo insólitos reproches de algunos hinchas en la última jornada, en la sorpresiva derrota contra el Ciclón.
¿Podrá el Tolo sacar su estirpe ganadora? Ya le ocurrió algo parecido en su anterior etapa en Independiente. También, en Newell’s. Y al final, se consagró en ambas fronteras. Pero el fixture es complicado y ahora... El Tolo, a su manera, desafía: "Independiente depende de sí mismo. Es una lástima que se nos hayan escapado tantos puntos en una semana. No quiero ponerlo como excusa, pero las ausencias de jugadores importantes se sienten. Las lesiones fueron un calvario".
3 partidos perdió Independiente; los dos últimos seguidos, con Gimnasia y San Lorenzo.
DIXIT
"No estar primeros nos saca presión, porque había mucha gente que quería que Independiente perdiera por ser grande. Va a ser duro, pero vamos a dar pelea." (Américo Gallego)
Fuente: Canchallena.com
Publicar un comentario
Son correctos los cuatro analisis...Los veo igual...
Que bajón el nuestro...
Abrazos
Emiliano
Publicar un comentario