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Independiente fue a jugar la Copa Sudamericana, pero el dinero sólo le alcanzó para viajar 50 km. El regreso a los torneos internacionales, largamente esperado, duró muy poco. Habrá que levantar rápido el ánimo, ganar el clásico, y prenderse en la lucha por el Apertura.

No fue la Copa Sudamericana sino más parecido al Torneo de Invierno jugado frente a Gimnasia, aunque de noche, en otra de las gélidas que este invierno porteño depara. En el estadio Ciudad de La Plata Independiente dejó sus ilusiones de viajar por el continente cuando tenías los boletos sacados a cuatro minutos del final.

El baldazo de agua fría hizo escarchar aún más la sensación de que si había un equipo que estaba consiguiendo revertir su imagen y su juego era el Rojo, y que la impericia, cierto afán por guardarse lo poquito conseguido en vez de ir por un poco más, hizo que se quedara sin nada.

En dos cambios fatídicos Borghi dejó de lado el manual del lírico que pregona para mezquinar el partido metiendo dos defensores por los delanteros netos en cancha. En ese momento, y a más de 25 minutos del final, el equipo era más y parecía eliminar a puro toque a Estudiantes en su propia ciudad.

No fue así y por eso el golpe duele mucho más. Porque si el eliminado era el Rojo del primer tiempo nos hubiera dolido, pero hubiéramos visto justo el resultado ante un Independiente que venía arrastrando penurias desde el partido con Vélez en Liniers.

Boselli convierte el penal definitivo para Estudiantes
y esfuma los sueños sudamericanos del Rojo

Ahora hay que levantar esto. Se había creado mucha expectativa en el partido de ida, cuando un primer tiempo arrollador, como los 20 iniciales del segundo de ayer, hacían creer en un equipo sólido y contundente. Se esfumó en unos penales que nos dejaron afuera porque el de Mareque dio en un palo, a pesar de que todos -incluso ese, remarcamos en el comentario- fueron bien ejecutados.

Y no fue en una semana más. Fue en la previa del clásico. El domingo hay que ganarle a racing. No hay excusas para no dejar todo en la cancha, y de paso limpiar la pálida imagen de la fecha 17º del Clausura, cuando en el Amalfitani el 0 a 0 durmió a todos, incluso al Chatarrero de Pilar.

¿Podrá Independiente meterse de lleno en el Apertura luego del golpe de anoche? Debe hacerlo, concentrarse rápido en que habrá muchos equipos argentinos con la mente partida en los dos campeonatos y sacar provecho de la triste noticia de que no seremos nosotros uno de ellos.

Emiliano Penelas

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amiasnotas dijo... 21 de agosto de 2008, 2:45 p.m.

La verdad que es admirable ver cómo escribis en este blog. Sobre todo quiero destacar la objetividad que tenes al hacerlo. SOS UN PROFESIONAL.
Apertas!!!!
May

La Caldera del Diablo dijo... 22 de agosto de 2008, 1:13 a.m.

May: gracias... lástima haber perdido. Esperemos ganar el clásico.
Besos

Emiliano