En un partido para el olvido, Independiente fue goleado por Godoy Cruz por 4 a 1 en el Libertadores de América. No se salvó nadie en el equipo, que quedó a siete del líder del campeonato.
Último partido sin hinchas en el Libertadores de América, pero con un clima muy caliente por los "allegados", el Rojo sufrió muchísimo y jugó muy mal ante Godoy Cruz, se fue goleado y se aleja de Talleres, único líder de la Liga.
Un centro desde la derecha y una pelota que Insaurralde se lleva por delante frente a una mala salida del arquero visitante fue lo más claro del Rojo. Luego de eso llegó con fortuna Godoy Cruz, un tiro en el palo, el delantero que demora años en definir y cuando lo hace devil y sin ángulo es Thomas Ortega quien termina metiéndola adentro de su propia valla.
Desde ahí, el Rojo fue un boxeador que sintió el impacto y miraba la hora. El Tomba se fue al ataque y pudo aumentar en varias ocasiones. No hacía pie el equipo, y de contra, sobre la hora, recibió el segundo antes de irse al vestuario.
Sin cambios, lo que se vio al inicio del segundo tiempo fue una replica del final del primero. Pobre lo de Lucas Romero, acusó un pisotón sobre la banda, dejó seguir Herrera y cayó el tercero del Tomba. Los allegados se agarraron con el juez y el línea, pero la tarea de los propios era tan mala que no podíamos buscar excusas.
El empuje de los chicos, que ingresaron de a poco, fue lo mejorcito de la noche. Chila Márquez anotó su primer gol, un golazo fuera de contexto, que duró poco porque enseguida otra contra letal de los mendocinos para el 4 a 1 final. Se viene Vélez, y habrá que esperar cambios en un once donde nadie rindió.
Emiliano Penelas
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