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"Yo amo ser entrenador", dijo el ex técnico del Rojo, que habló por primera vez tras su salida del Club haciendo un balance positivo de su gestión, destacando el equipo de 2017 y agradeciendo a los Moyano.


"Cometí varios errores, para reconocerlos debería hacerlos en el seno del Club. En muchos momentos, el hecho de pensar en la economía del Club hacía que, en las decisiones de altas y bajas, con los directivos cometimos más de un error, pensando que había necesidad de vender. Yo si hubiese pensado más en mí, tomaba otras decisiones. No hubiera pensado tanto en la economía a corto plazo. En las altas y las bajas, a pesar del buen balance económico, en algún caso no deberíamos haber sido tan vendedores. En otros casos era imposible porque por el nivel de los futbolistas marcaba que el club no podía negarse a 15 millones de dólares, inclusive para el jugador", dijo Ariel Holan

"Cuando arrancamos el proceso en Independiente, lo primero que busqué fue recuperar la mística fuera de la cancha e identidad dentro de la cancha. Y esa mística la busqué con la gente que en mi adolescencia llevó a Independiente a un gran lugar internacional, Bertoni, Pavoni, el Japonés Pérez, Bochini, obviamente, hombres de consulta como un cuerpo orgánico. Esa identidad la llevamos dentro de la cancha. El equipo del 2017 fue agresivo y vertical, un equipo con identidad. El del 2018 no tenía tanto vértigo, pero sí buen trato de pelota. Así transitamos lo que era innegociable, la identidad de Independiente. Además, hicimos cosas que no se ven, como en infraestructura, el club va a inaugurar cinco canchas de nivel que no las tiene nadie en Argentina. Pusimos atención en todas esas cosas, como en kinesiología que no había estructura en el club", agregó el entrenador.

Consultado por el presente, Holan manifestó: "Yo quiero muchísimo a Independiente, y cualquier opinión fuera del balance de lo que hice va a generar conjeturas. El club tiene entrenador, ojalá pueda hacerlo lo mejor posible. Quiero dar vuelta la página".

Volviendo a su tránsito como entrenador, agregó: "En dos años ganamos dos Copas, quedamos fuera en cuartos de final de la Libertadores con River, un rival que es de los mejores del continente. Vendimos por 60 millones de dólares y compramos por 22, y de eso recuperamos porque ahora se fueron a préstamo. El balance administrativo fue muy bueno. Veníamos de una organización deficitaria y dejamos las arcas del club en orden. Estoy agradecido a Pablo y Hugo Moyano por la posibilidad que me dieron. Cometimos errores, aprendimos muchísimo de esos errores, pero el balance es muy agradecido. Esta dirigencia lo tomó recontra fundido y de la B Nacional", recordó en diálogo con CNN Radio.

"También apuntamos a refundar todos los predios para que Independiente tenga una infraestructura mejor. Hay canchas nuevas, el centro de alto rendimiento y demás cosas que ayudan a conseguir logros deportivos. La gente de  Independiente sólo me demuestra cariño, como lo hizo en los dos años y medio que fui entrenador", contó. 

"Culturalmente no estamos preparados para procesos largos. Tienen que darse variables que es muy difícil que se puedan alinear. Dependen del contexto, cuerpo técnico y dirigencia. Cada institución tiene sus coyunturas en momentos puntuales", reflexionó.

"En Argentina, todo es blanco o negro, todo es vida y muerte. En otras sociedades todo es más natural. En Argentina soy de los pocos que llega al fútbol sin haber sido futbolista. Es así, no me lo cuestiono", dijo.

"Yo amo ser entrenador, lo hice desde los 16 años y tengo 59. De hockey, de fútbol. No sé otra cosa, mi amor eterno con mi profesión. Tener el privilegio de hacerlo en Independiente fue muy gratificante", sostuvo.

"Todos creemos que sabemos de fútbol, yo creo que hay que prepararse. Yo disfruté mi etapa de analista, mi etapa de ayudante y cuando entendí que no me llenaba, empecé me carrera de entrenador", dijo.

Por último, y consultado por su presente y su futuro, Holan respondió "Nos cuesta mucho ser ganadores en Copa y campeonato al mismo tiempo en Argentina. Por eso fui a ver a Inglaterra, los clubes de primer nivel mundial son parecidos a una selección. Acá cuesta, el contacto físico en América es diferente al de Europa. Acá en cada partido terminás con una bolsa de hielo. Los métodos regenerativos y alimentación tenemos que crecer en Sudamérica".

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