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La Conmebol dispuso que a partir de 2019 los clubes que aspiren participar en sus competiciones continentales deberán contar con un equipo de primera y una división juvenil de fútbol femenino.


El descenso de Independiente trajo nuevamente al tapete el tema del fútbol femenino dentro del Club, que finalizó la temporada con una pésima actuación, en lo que evidentemente es un equipo aún en formación.

El tema es que en septiembre de 2016, la Conmebol agregó a su Reglamento de Licencias de Clubes un inciso que requería a las instituciones un primer equipo y una categoría juvenil femenina. De lo contrario, los mismos no podrían disputar ni la Copa Libertadores en su rama masculina cómo así tampoco la Copa Sudamericana, a partir de 2019.

Según el sitio "El femenino" en el fútbol argentino existen los clubes directamente afiliados a AFA y los indirectamente afiliados (a través del Consejo Federal) quienes confluyen en la Primera División además de la Primera B Nacional. Esto no sucede en los torneos de Fútbol Femenino de la casa madre del fútbol nacional.

En el Torneo de 30 equipos de la máxima categoría masculina hay 21 de ellos que son directamente afiliados. Sólo 6 de los clubes de la élite del fútbol argentino cumplen con la disposición de Conmebol: Boca, River, San Lorenzo, Estudiantes, Independiente y Huracán. Además, hay 6 en la Primera B Metropolitana, 2 en la Primera C y 2 en la Primera D. Por su parte, son 16 de los afiliados de forma directa a AFA que tienen su conjunto femenino mientras que 70 no lo hacen.

Cuando finalicen los Torneos edición 2016/17 de la Primera A y la Primera B, las instituciones que estén interesadas podrán sumarse a una nueva temporada de los torneos de AFA. Mientras tanto, el avance del fútbol femenino entró en una tendencia de crecimiento irreversible.

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