0
Dos veces por semana, por razones laborales, voy a una oficina ubicada en Bolivar 191 y paso por la esquina de Hipolito Yrigoyen y Perú, lugar este donde se fundó el Club Atlético Independiente.


Hoy me detuve, observé las plaquetas conmemorativas y vinieron a mi cabeza dos palabras. Una actitud y otra aptitud.

El football no es más que esto. La combinación de esas dos virtudes. Separadas, provocan desaciertos en el juego y en su resultado.

Pasan por mi recuerdo jugadores de la talla de Rubén Marino Navarro, Ricardo Elvio Pavoni y el mismo Rolan. Hombres con actitud, una amplia aptitud. Me choco con Ricardo Enrique Bochini, Sastre, De La Mata. Aptitud brillante y días de mucha actitud.

Hoy nuestro técnico cuando gana un partido a un equipo que ya está en promoción, pronto a concursar en la “B” mira el cielo y le agradece a Dios.

Amigo hincha, me puede explicar si yo estuve dormido los últimos diez años o que pasó con la gloria conseguida durante más de cien años. Espero una respuesta urgente.

Osvaldo Abel López
Especial para La Caldera del Diablo

Publicar un comentario