"El domingo hay que ganar", repitió muchas veces Mohamed luego del gran triunfo ante Peñarol. Se venía River y el DT intentó mentalizar a sus muchachos para sacar los tres puntos para estar más tranquilos en la tabla de promedios y de paso cortar la racha nefasta, que ahora ya lleva 12 encuentros, sin victorias en torneos locales. Entonces, consumada la derrota, queda una sola reflexión: ¿por qué el equipo se potencia en la Copa y cuando el rival de enfrente es de cabotaje no rinde ni un 30%? La primera impresión es que jugar dos torneos es cansador y doblega las piernas. Para mí es facilista, ya que recién el Rojo disputó nueve partidos en el año si contamos los dos del torneo de verano. Además, casi siempre el Turco rotó el plantel, como pasó ayer, cuando en la semana están las dos competencias. Porque si bien se pierde en el final luego de que fallen Tuzzio, Matehu e Hilario, hay que ser realistas: los de Jota Jota fueron siempre más durante todo el partido y ya saben como encarar estos choques cuando los porotos escasean. Y si bien hubo chances, en especial la que erró Silvera, nunca el Rojo se sintió cómodo.Independiente, en lo que va de la 2010/11, sólo venció a Gimnasia de los clubes que están mal con el promedio. Y, lo que es peor, desde que se llevó la Sudamericana cayó con Huracán, Tigre y ayer, sin convertir goles. ¿Más? deberá visitar a Arsenal, Quilmes, Olimpo, al Lobo, al Matador y sólo tendrá al Globo de local en la última fecha. El panorama pinta difícil. Jugadores, depende de ustedes.
Beto Tisinovich
Diario Olé, lunes 28 de febrero de 2011
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