A los 24 años, el arquero está afirmado como titular. Pieza clave de uno de los animadores del Clausura, afirma que "aún falta mucho camino por recorrer".
La posibilidad le llegó de grande, a los 23 años, hace un poco más de una rueda. Y le llegó por la lesión de un compañero (Hilario Navarro). Y se aferró tanto pero tanto a esa chance, o mejor dicho, se aferró tanto pero tanto al arco, que no hay manera de sacarlo. Ni a los codazos: "Me dieron un golpe bárbaro en la cabeza... En la cancha me pegaron con la gotita y por suerte pude seguir". El que relata lo que le sucedió en el primer tiempo en Victoria es Adrián José Gabbarini, el uno cada vez más consolidado en el arco de Independiente.
Como en el clásico, este mendocino que -como tantos otros arqueros- fue moldeado por Pepé Santoro, resultó determinante con sus manos para que el conjunto de Américo Gallego se quedara con un ajustadísimo triunfo ante Tigre. Un triunfo que multiplica las ilusiones en Avellaneda. "Era importantísimo ganar después del clásico con racing. Debíamos reafirmar ese triunfo. Y nos costó. Sabíamos que nos iba a costar porque es una cancha dura. En el torneo pasado también le ganamos a racing y después empatamos con Tigre de local, y ahí perdimos un poco de terreno. Esta vez se nos dio", cuenta a Clarín el arquero que llegó en 2006 procedente de Independiente Rivadavia y que ya acumula 22 partidos como titular.
- Se les dio, pero lo que tuvieron que sufrir...
- Sí, sufrimos demasiado. En el primer tiempo hicimos mejor las cosas, fuimos más agresivos. Por ahí si entraba el penal del Chipi (Gandín) el desarrollo del partido podía haber cambiado. Después sí, en el complemento, especialmente los últimos veinte minutos, ellos nos encerraron un poco con muchos centros.
- ¿Ustedes se tiraron atrás o Tigre los llevó a eso?
- Un poco y un poco. Ellos estaban en desventaja y no les cabía otra que salir a buscar el partido. Nuestra idea era retrasarnos un poco para salir rápido de contra. Y tuvimos algunas chances. De todas maneras, más allá de que en el último tramo sufrimos un poco, hay que destacar que Independiente siempre, en todos lados, sale a atacar. Nosotros no esperamos a estar en desventaja para ir al frente. Hay muchos equipos que ponen un 4-4-2 y te esperan todos metidos atrás hasta que se encuentran en desventaja. Después es fácil salir a buscar.
- Antes de los dos partidos que pasaron, Gallego dijo que si ganaban estaban para pelear el título. Ahora que ya los pasaron positivamente, ¿qué sienten o que dicen ustedes en la intimidad?
- Que estamos muy bien, muy metidos, motivados. El equipo está maduro, sabe a qué juega y hay individualidades que están pasando por un buen momento. Esta claro que vamos bien; pero sabemos que aún queda mucho camino por recorrer.
Fernando Gourovich
Diario Clarín, viernes 5 de marzo de 2010
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