Desde un principio sonó a recurso electoral que por otra parte no pensamos que la actual dirigencia necesite para ganar la presidencia nuevamente. Y sabíamos que en este juego de sacarle provecho a todo (lo hacen los políticos, por qué no lo iban a hacer los dirigentes o aspirantes a serlo de una institución deportiva), el 25 de noviembre una cinta se iba a cortar. Sea para inaugurar una cancha de fútbol o dos tribunas con un arco y quizás algo de pasto.
De todas formas, mientras veíamos (y vemos) los avances en la construcción, nos parecía demasiado pronto pensar en que dentro de dos meses podría estar todo terminado al menos "lo que se ve" (tribunas, butacas, pintura, luces). Sin embargo, nunca se dijo, salvo algo que siempre creemos que el hincha supuso: para esa fecha no iba a estar el techo, la confitería, el museo, etc. Es decir, todo lo "accesorio" a la "casa propia".
En ese sentido, nos preocupa lo que hoy publica Diario Popular al afirma que "en breve la dirigencia anunciará que la inauguración del estadio Libertadores de América no será el próximo 25 de noviembre, sino que la misma pasará para febrero del año próximo". Y luego aclara que "de todos modos el 25 habrá una presentación ya que no estará todo el estadio habilitado y luego de la inspección del COPROSEDE se dará a conocer la cantidad de localidades que saldrán a la venta y las alternativas de la apertura."
También da por descartada la posibilidad de ver un partido de fútbol formal, "de once contra once" y que "tendrá lugar un show musical". Es la primera vez que se oyen o leen comentarios de esa naturaleza por parte de la dirigencia Roja, por lo que el matutino consultó al respecto a Cristian Mattera, Secretario del Club, quien sostuvo que "esto es un tema semántico".
¿Se entiende? Por si acaso, Mattera aclaró: "Llamalo inauguración, apertura, presentación. Nunca dijimos que iba a estar habilitado a esa fecha así que estamos dentro de lo que habíamos estipulado". Ahora sí...
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