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Lanús le hizo precio a un Independiente que sólo estuvo en cancha los primeros 25 minutos. En una verdadera oferta de temporada, Acosta, Sand y Valeri perdonaron al arco Rojo. Y como si esto fuera poco, Assmann fue la gran figura del equipo, evitando un resultado aún mayor.

Gioda no tuvo suerte en su regreso oficial luego de la lesión

Pálida imagen la del Rojo de Troglio en la primera fecha del campeonato, bailando con un Lanús que terminó siendo poco efectivo en relación con la gran cantidad de situaciones de gol que creó.

Si el principio del partido era parejo, entretenido y de ida y vuelta, fue porque quizás Independiente planteó el juego un poco más arriba y el Granate, cauto con un equipo que intercalaba algunos jugadores que no siempre son titulares, pensando en la Copa Libertadores, esperó en su campo. Poco menos de veinte minutos le llevó al conjunto de Cabrero darse cuenta de que Independiente ofrecía espacios por todos lados, sobre todo por la banda izquierda del ataque, la derecha de la defensa, el carril que Machín no pudo cubrir en todo el partido.

Para colmo, en la mitad de la cancha casi no había marca, y el pobre Calello se duplicaba para llegar a todos lados. Muy poco fue lo que mostró Ledesma, que fue reemplazado extenuado, en el segundo tiempo, diez minutos después de que decidiera dejar de correr. Mareque, que debía abrirse por su banda, se cerraba constantemente y sólo apelaba a los pelotazos, mientras Montenegro no lograba hacerse de la pelota. Arriba, a la mala tarde de Denis, impreciso y fuera de tiempo ante los defensores granas, se sumaba la poca compañía que le hacía Sosa.

Así y todo, si bien el local podría haberse ido ganando la primera etapa, el empate no parecía muy descabellado.

La segunda mitad sería completamante distinta. Lanús se dio cuenta de que debía atacar, y en sólo cinco minutos creó chances como para meter cuatro goles. Justamente dentro de esa seguidilla fue un centro lanzado desde la derecha por Valeri que encontró la cabeza de Gioda sobre el primer palo y el gol de Lanús.

La gente agotó las entradas y acompañó al equipo, como siempre

Desde ese momento Independiente sólo creó dos situaciones: una a los 14' increíblemente marrada por Denis, cuando entrando al área tenía todo para liquidar a Bossio y la siguiente cuando el Tanque se iba y fue derribado por Graieb en el borde del área. El tiro libre de Montenegro se fue por encima del travesaño a los 48'. En el medio de todo eso, Assmann fue la gran figura con tapadas monumentales y otras increíbles.

Sand, Acosta y Valeri fueron tres fantasmas para los jugadores del Rojo. Estos tres jugadores, pero en realidad todo Lanús, juega bien, toca mejor y sabe cómo golpear. Que hoy no haya goleado es simplemente una anécdota. Independiente, de no ser por su arquero, no pudo hacer nada por evitarlo.

Como recuerdo quedará en la historia que hoy debutaron dos pibes de la cantera, de 17 y 18 años, Patricio Rodríguez y Diego Churín.

Emiliano Penelas

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