La Caldera del Diablo: Roberto Sosa

El árbitro, centro de la polémica

Si bien no fue determinante en el resultado, tanto Diego Abal como sus asistentes tuvieron una mala tarde en La Plata. Santoro, de todas maneras, le quizo polemizar e insistió en el mea culpa. <img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5307913852192606418" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjqKtOzuA8q4DefjhnizU9rlXjDH9WWgw2Wp0qlFajlgByIY9JWAuCj81gaxj9iOSW0YYNMcCESOMNCJi7qRQ12IFJXxwIazRsJ4H-JV-E_aDhjDmPad7GgcXrJvBwk0O1iSLLZFE_FEPj8/s400/Abal.jpg" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 400px; CURSOR: hand; HEIGHT: 288px; TEXT-ALIGN: center" />Montenegro discute una falta con Abal. De ese tiro libre vendría el primero del Lobo.No fue una buena tarea la de Diego Abal, juez del partido entre Gimnasia e Independiente, aunque Miguel Ángel Santoro no quiso polemizar con el juez ni referirse demasiado a su actuación. “Si bien no cobró algunas cosas, no debemos hablar del árbitro y sí hacer los goles. Necesitamos dos triunfos seguidos”. Abal apeló demasiado a dejar seguir el juego, el famoso "siga-siga", incluso en momentos en que la falta parecía clara y no estaban dadas las condiciones de ventaja. Además, se apresuró en mostrar algunas tarjetas (a Ledesma, por ejemplo) y hubo otras que nunca llegaron (al Pampa Roberto Sosa, entre otros). Estuvo correcto en la expulsión de Moreira, sobre el final del partido.