Claudio Keblaitis, vice de Independiente, denunciará el maltrato que los hinchas sufrieron en Rosario. “Le pegaron al club”, aseguró.
Fue desesperante no poder hacer nada por los socios que llevamos a Rosario. Parece que hasta que no vuelva uno en un cajón, no paran. Me cago en la policía rosarina, me gustaría tener al responsable del operativo cara a cara para decírselo mirándolo a los ojos”. Las palabras son contundentes y se las dijo a Olé Claudio Keblaitis, vice de Independiente y responsable de la Subcomisión de viajes del club. “Yo no viajé pero soy responsable de todo lo que suceda y los coordinadores de los seis micros que el club envió a Rosario me llamaban y, cada vez, me volvía más loco. Brindamos un servicio para que la familia vaya en paz a la cancha y pasan estas cosas. Todavía me dura el enojo”.
- ¿Van a realizar alguna denuncia?
- Claro. Mañana (hoy) hablaré con Javier (Cantero) para ponerlo en sintonía con lo sucedido. Si el club no realiza la denuncia pública, política y policial lo seguiré haciendo por mi cuenta.
- ¿Hubo golpes de parte de la policía rosarina?
- Golpes y amenazas. Mis coordinadores me contaron que les decían: “Dale, bajen de los micros así nos dan un motivo para molerlos a palos”. También amenazaron: “Ustedes reaccionen que les mandamos a las fuerzas de choque”. Pegarle al hincha es sinónimo de pegarle al club.
- ¿Antes o después del partido?
- Antes y después. Los retuvieron dos horas y media en el peaje y después no los dejaban entrar en la cancha. De hecho, integrantes de la barra por los que rige el derecho de admisión, estaban adentro de la tribuna, sin entradas cuando los socios que habían comprado sus tickets estaban afuera del estadio, siendo maltratados. El mundo del revés.
Olé intentó comunicarse con Marcelo Altamirano, el jefe del operativo policial del partido, pero en la seccional quinta de Rosario, avisaron que no estaba disponible ante el requerimiento periodístico. Mientras, hoy, Claudio Keblaitis hará la denuncia.
Déborah D'Amato, diario Olé
Fue desesperante no poder hacer nada por los socios que llevamos a Rosario. Parece que hasta que no vuelva uno en un cajón, no paran. Me cago en la policía rosarina, me gustaría tener al responsable del operativo cara a cara para decírselo mirándolo a los ojos”. Las palabras son contundentes y se las dijo a Olé Claudio Keblaitis, vice de Independiente y responsable de la Subcomisión de viajes del club. “Yo no viajé pero soy responsable de todo lo que suceda y los coordinadores de los seis micros que el club envió a Rosario me llamaban y, cada vez, me volvía más loco. Brindamos un servicio para que la familia vaya en paz a la cancha y pasan estas cosas. Todavía me dura el enojo”.
- ¿Van a realizar alguna denuncia?
- Claro. Mañana (hoy) hablaré con Javier (Cantero) para ponerlo en sintonía con lo sucedido. Si el club no realiza la denuncia pública, política y policial lo seguiré haciendo por mi cuenta.
- ¿Hubo golpes de parte de la policía rosarina?
- Golpes y amenazas. Mis coordinadores me contaron que les decían: “Dale, bajen de los micros así nos dan un motivo para molerlos a palos”. También amenazaron: “Ustedes reaccionen que les mandamos a las fuerzas de choque”. Pegarle al hincha es sinónimo de pegarle al club.
- ¿Antes o después del partido?
- Antes y después. Los retuvieron dos horas y media en el peaje y después no los dejaban entrar en la cancha. De hecho, integrantes de la barra por los que rige el derecho de admisión, estaban adentro de la tribuna, sin entradas cuando los socios que habían comprado sus tickets estaban afuera del estadio, siendo maltratados. El mundo del revés.
Olé intentó comunicarse con Marcelo Altamirano, el jefe del operativo policial del partido, pero en la seccional quinta de Rosario, avisaron que no estaba disponible ante el requerimiento periodístico. Mientras, hoy, Claudio Keblaitis hará la denuncia.
Déborah D'Amato, diario Olé
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Ya contaste una vez como rompian los vidrios de autos de hinchas de Independiente (y que pasaba lo mismo con otros hinchas visitantes) y robaban lo que habia dentro ante la mirada cómplice de la policía rosarina que los dejaba hacer sin intervenir.
La policía rosarina es así desde siempre y lamentablemente no creo que cambie.
Por twitter dijimos que el problema es repetido en Rosario, y lo hemos visto no sólo con Independiente.
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