La ausencia de carácter de Independiente en el Monumental ya dejaba de ser sensación térmica y hacía subir la temperatura real en la tribuna visitante de Núñez. Y los hinchas estallaron. Los insultos fueron dirigidos hacia los que toman decisiones: el presidente Julio Comparada y el manager César Luis Menotti. Es que el hincha entendió que la responsabilidad mayor les cabe a los dirigentes y al Flaco, hacedores del proyecto que tiene a Garnero como ocasional timonel y a Menotti como capitán. Y como el capitán nunca abandona el barco, la dirigencia tiene bien en claro que este proyecto es Flaco, y que el César sólo se irá si él decide hacerlo.
El respaldo surgió tras la reacción de la gente en River, un sitio históricamente inhóspito para el Rojo (perdió 47 y ganó 18), que en esta ocasión se convirtió en un campo minado por la reaparición de Gallego. El Tolo, a quien no se le renovó el contrato porque no encajaba en el proyecto iniciado con Garnero, culpó más a Menotti que a Comparada por su salida. Y el presidente la ligó por el desgaste de una gestión que ya lleva casi cinco años, un Estadio en construcción y ningún título.
En la mirada de la CD, Menotti es “un manager de excelencia, por lo que genera puertas adentro, con la palabra a los técnicos y a los jugadores, y también afuera del club con su imagen”. Pero también advierten que este cimbronazo se supera con resultados. Y en tal sentido, también entienden que deberán engordar con triunfos una estructura que pretende acercar a Independiente, según lo expuso el propio Menotti, “al Barcelona”. De hecho, el Flaco ha manifestado que pretende tener en Domínico una réplica a escala de La Masía (la casa de las Inferiores del Barsa), un plan que por el momento está en ello; por caso, los juveniles del Rojo llevan varios años prescindiendo del enganche.
Está claro, entonces, que Independiente necesita ganar. No fueron pocos los dirigentes que salieron con mucha bronca del Monumental (algunos, incluso cuando River convirtió el 2-1). Hay malestar con algunos rendimientos, pero la CD sabe que tampoco puede patalear demasiado porque el plantel ha venido aceptando las postergaciones en algunos pagos. Igual, dicen que el triunfo no está lejos e incluso generó mayor desazón el empate con Argentinos de local que la derrota con River de visitante.
¿Y Garnero? La dirigencia confía en que logrará sacar a flote al equipo. A diferencia de Claudio Borghi en Boca, por ahora Dany no se puso plazos. Pero él conoce bien la historia y las exigencias del club. En Mitre 470 aseguran que no se juega el puesto (aunque ya hayan sonado nombres de posibles reemplazantes), pero también le ponen la espada de Damocles: “Con Argentinos no podemos quedar eliminados”.
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